domingo, 29 de octubre de 2023

COMENTARIO AL EVANGELIO DEL 30 DE OCTUBRE DE 2023

 Lc 13,10-17: A ésta, que es hija de Abrahán, ¿no había que soltarla en sábado?

Un sábado, enseñaba Jesús en una sinagoga.

Había una mujer que desde hacía dieciocho años estaba enferma por causa de un espíritu, y andaba encorvada, sin poderse enderezar.

Al verla, Jesús la llamó y le dijo:

-Mujer, quedas libre de tu enfermedad.

Le impuso las manos, y enseguida se puso derecha.

Y glorificaba a Dios.

Pero el jefe de la sinagoga, indignado porque Jesús había curado en sábado, dijo a la gente:

-Seis días tenéis para trabajar: venid esos días a que os curen, y no los sábados.

Pero el Señor, dirigiéndose a él, dijo:

-Hipócritas: cualquiera de vosotros, ¿no desata del pesebre al buey o al burro, y lo lleva a abrevar, aunque sea sábado?

Y a ésta, que es hija de Abrahán, y que Satanás ha tenido atada dieciocho años, ¿no había que soltarla en sábado?

A estas palabras, sus enemigos quedaron abochornados, y toda la gente se alegraba de los milagros que hacía.


Como en tantas disputas que tiene Jesús con los fariseos, escribas, y jefes de las sinagogas está en juego el cumplimiento de la voluntad De Dios. Todas estas instituciones hacían coincidir la voluntad de Dios con la ley escrita. Y es lo lógico. Pero se olvidaban la orientación de la ley: liberar al hombre y no esclavizarlo más. Por ello, el mejor día para soltar a esa mujer es el sábado. 


Ahí está la paradoja, el sábado que tiene que significar la liberación del trabajo para el culto a Dios, para darle gracias a Dios, sin embargo se prohíbe que pueda ser curada.


Tenemos que recuperar el aspecto sanador y liberador del encuentro con Dios, y dejar a un lado la exigencia del cumplimiento. Dios es el sanador y liberador por excelencia. El encuentro con Dios es liberador.


Que mal lo hacemos cuando el mensaje que dejamos en los otros es un mensaje de exigencia que pueda alienarnos. Es como vestir un santo para desvestir otro. 


Dejémonos soltar por Jesús, liberar por Él, y seamos agentes de liberación en los otros. 

jueves, 26 de octubre de 2023

COMENTARIO AL EVANGELIO DEL 27 DE OCTUBRE DE 2023

   Lc 12,54-59: Si sabéis interpretar el aspecto de la tierra y del cielo, ¿cómo no sabéis interpretar el tiempo presente?


En aquel tiempo, decía Jesús a la gente: –Cuando veis subir una nube por el poniente, decís enseguida: «Chaparrón tenemos», y así sucede. Cuando sopla el sur decís: «Va a hacer bochorno», y lo hace. Hipócritas: si sabéis interpretar el aspecto de la tierra y del cielo, ¿cómo no sabéis interpretar el tiempo presente? ¿Cómo no sabéis juzgar vosotros mismos lo que se debe hacer? Cuando te diriges al tribunal con el que te pone pleito, haz lo posible por llegar a un acuerdo con él, mientras vais de camino; no sea que te arrastre ante el juez y el juez te entregue al guardia, y el guardia te meta en la cárcel. Te digo que no saldrás de allí hasta que no pagues el último céntimo. 


Saber interpretar los "signos de los tiempos", es una de las razones por las cuales Juan XXIII convocó el Concilio Vaticano II. La expresión "signos de los tiempos", me invita al agradecimiento, a la prudencia, a la contemplación y al discernimiento. Al agradecimiento porque esta expresión denota la actuación permanente de Dios en la historia.


La mano de Dios no deja de guiar los caminos de la historia, de manera que todo quede referido a Cristo. Muchas veces, no conseguimos descubrir esa "mano providente", en nuestras situaciones y en la historia en general. Entonces podríamos pasar de hablar de la historia a la expresión "historia de la salvación".


Darnos cuenta que muchas cosas suceden por y para "algo" A la prudencia y al discernimiento, para no leer los acontecimientos a la ligera, sino intentar desentrañar los hilos con la prudencia como uno de los dones del Espíritu Santo y el discernimiento como camino de escrutar la voluntad de Dios.


A la contemplación para poder disfrutar de lleno de esta vida, estos acontecimientos como un "kairós" (gracia), que el Señor nos ha regalado y así entregarnos de lleno a la transformación de la realidad. Hoy en día hacen falta profetas que sepan guiarnos por los signos de los tiempos. Personas que se sientan enviados de Dios y que nos alienten en la esperanza...

miércoles, 25 de octubre de 2023

COMENTARIO AL EVANGELIO DEL 26 DE OCTUBRE DE 2023

Lc 12,49-53: No he venido a traer paz, sino división.


En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:

–He venido a prender fuego en el mundo: ¡y ojalá estuviera ya ardiendo! Tengo que pasar por un bautismo, ¡y qué angustia hasta que se cumpla!

¿Pensáis que he venido a traer al mundo paz? No, sino división.

En adelante, una familia de cinco estará dividida: tres contra dos y dos contra tres; estarán divididos: el padre contra el hijo y el hijo contra el padre, la madre contra la hija y la hija contra la madre, la suegra contra la nuera y la nuera contra la suegra.


¡Qué ánimos nos das Jesús que nos vienes a traer división y no paz!


En primer lugar, en el evangelio Él nos aclara que la paz que viene a traer es distinta de la del mundo, por lo que no debemos comparar.


En segundo lugar, la división hace referencia a la no posibilidad de tener medias tintas, dobles verdades, dos caras ante Jesús. Ante Jesús hay dos posibilidades: lo aceptas o lo niegas. En Él no caben las ambigüedades. El que lo acepta a medias, no lo acepta. Se ama o no se ama. 


En tercer lugar, Jesús ha venido a traer movimiento a la tierra. No un espíritu de cobardía, de pasividad sino de valentía y movimiento. Ha venido a traer pasión. Todo ésto es lo que trae consigo el amor: movimiento, pasión, etc.


Pidámosle a Jesús que nos queme por dentro.

COMENTARIO AL EVANGELIO DEL 25 DE OCTUBRE DE 2023

  Lc 12,39-48: Al que mucho se le dio, mucho se le reclamará.

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:

«Comprended que si supiera el dueño de casa a qué hora viene el ladrón, velaría y no le dejaría abrir un boquete en casa.

Lo mismo vosotros, estad preparados, porque a la hora que menos penséis viene el Hijo del hombre».

Pedro le dijo:

«Señor, ¿dices esta parábola por nosotros o por todos?».

Y el Señor dijo:

«¿Quién es el administrador fiel y prudente a quien el señor pondrá al frente de su servidumbre para que reparta la ración de alimento a sus horas?

Bienaventurado aquel criado a quien su señor, al llegar, lo encuentre portándose así. En verdad os digo que lo pondrá al frente de todos sus bienes.

Pero si aquel criado dijere para sus adentros: “Mi señor tarda en llegar”, y empieza a pegarles a los criados y criadas, a comer y beber y emborracharse, vendrá el señor de ese criado el día que no espera y a la hora que no sabe y lo castigará con rigor, y le hará compartir la suerte de los que no son fieles.

El criado que, conociendo la voluntad de su señor, no se prepara ni obra de acuerdo con su voluntad, recibirá muchos azotes; pero el que, sin conocerla, ha hecho algo digno de azotes, recibirá menos.

Al que mucho se le dio, mucho se le reclamará; al que mucho se le confió, más aún se le pedirá».


Al que mucho se le dio, mucho se le reclamará; al que mucho se le confió, más aún se le pedirá. Como tantas veces, las expresiones de Jesús en nuestras traducciones no expresan del todo el espíritu de lo que quiere decir. Nosotros lo entendemos como una exigencia grande. Puedo entenderlo como las ayudas que da el gobierno que luego hay que declararlas a hacienda. Y ésto desdice del Jesús misericordioso que vamos conociendo más. 


Por otro lado, nunca quiero decir que todo valga, que da lo mismo todo. Pero entre una exigencia que nos pueda asfixiar y todo jauja, hay un término medio en el que creo que se mueve Jesús.


Yo creo entender, que nos está advirtiendo que los dones son para ponerlos al servicio DE LA MISIÓN.  No son para uno. Son para el crecimiento de la comunidad, que siempre está en camino y en salida.


Lo contrario provoca dos enfermedades: la autorreferencialidad y según el Papa lo que da es la muerte de la comunidad. Lo segundo es el orgullo que nos puede provocar, y ésta también es la muerte de todo lo que Dios pudiera hacer en nosotros. 


Por ello, no te asfixies por producir, sino por entregarte. Dios (como diría Santa Teresa de Calcula), no te pide el éxito sino el trabajo. 

lunes, 23 de octubre de 2023

COMENTARIO AL EVANGELIO DEL 24 DE OCTUBRE DE 2023

 Lc 12,35-38: Dichosos los criados a quienes el señor, al llegar, los encuentre en en vela.


En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:


–Tened ceñida la cintura y encendidas las lámparas: Vosotros estad como los que aguardan a que su señor vuelva de la boda, para abrirle, apenas venga y llame.


Dichosos los criados a quienes el señor, al llegar, los encuentre en vela: os aseguro que se ceñirá, los hará sentar a la mesa y los irá sirviendo.


Y si llega entrada la noche o de madrugada, y los encuentra así, dichosos ellos.




El Señor nos invita a tener ceñida la cintura y encendidas las lámparas. Cuando el señor vuelve pronto, es fácil. Lo complicado es tener ceñida la cintura y encendidas las lámparas cuanto tarda en llegar.


Estamos acostumbrados a que todo se haga rápido y que todo sea cambiante. Si se alarga en el tiempo, o nos cansamos, o nos olvidamos. En seguida perdemos la tensión y nos relajamos. Ya somos incapaces de mantener un compromiso en el tiempo. Nos da vértigo.


El cansancio es uno de los males de nuestro tiempo. Nos cansamos de todo. Nos cansamos rápidos.

Sin embargo, sólo el que persevera en todos los ámbitos, podrá hacer algo en la vida. Por eso Jesús los llama dichosos. 


En la Evangelii Gaudium el Papa nos habla de la acedía.

Así se gesta la mayor amenaza, que «es el gris pragmatismo de la vida cotidiana de la Iglesia en el cual aparentemente todo procede con normalidad, pero en realidad la fe se va desgastando y degenerando en mezquindad». Se desarrolla la psicología de la tumba, que poco a poco convierte a los cristianos en momias de museo. Desilusionados con la realidad, con la Iglesia o consigo mismos, viven la constante tentación de apegarse a una tristeza dulzona, sin esperanza, que se apodera del corazón como «el más preciado de los elixires del demonio». Llamados a iluminar y a comunicar vida, finalmente se dejan cautivar por cosas que sólo generan oscuridad y cansancio interior, y que apolillan el dinamismo apostólico. Por todo esto, me permito insistir: ¡No nos dejemos robar la alegría evangelizadora!

domingo, 22 de octubre de 2023

COMENTARIO AL EVANGELIO DEL 23 DE OCTUBRE DE 2023

 Lc 12,13-21: ¿De quién será lo que has preparado?


En aquel tiempo, dijo uno de entre la gente a Jesús: 

«Maestro, dile a mi hermano que reparta conmigo la herencia». 

Él le dijo: 

«Hombre, ¿quién me ha constituido juez o árbitro entre vosotros?». 

Y les dijo: 

«Mirad: guardaos de toda clase de codicia. Pues, aunque uno ande sobrado, su vida no depende de sus bienes».

Y les propuso una parábola: 

«Las tierras de un hombre rico produjeron una gran cosecha. Y empezó a echar cálculos, diciéndose: 

“¿Qué haré? No tengo donde almacenar la cosecha”. 

Y se dijo: 

“Haré lo siguiente: derribaré los graneros y construiré otros más grandes, y almacenaré allí todo el trigo y mis bienes. Y entonces me diré a mí mismo: alma mía, tienes bienes almacenados para muchos años; descansa, come, bebe, banquetea alegremente”. 

Pero Dios le dijo: 

“Necio, esta noche te van a reclamar el alma, y ¿de quién será lo que has preparado?”. 

Así es el que atesora para sí y no es rico ante Dios».


Me gustaría comentar dos puntos del evangelio de hoy. Hay dos expresiones de Jesús que me cuestionan: "su vida no depende de sus bienes"; "date buena vida".

Identificamos con facilidad la riqueza, los bienes como una bendición y también como elemento para una buena vida. Ni el placer ni la comodidad lo son todo en la vida, ni el placer ni la comodidad aquilatan la vida.

La vida se mide por el amor y el servicio, ya lo dijo Jesús este fin de semana. Si nos empeñamos en acumular para mejor vivir...perdemos miserablemente el tiempo y la vida. Jesús los llama necios.

Sin embargo, Jesús no vino a la tierra a vivir en palacios y nos enseñó en qué consiste la vida...sino al contrario, renunció a todo signo de grandeza, y nos dijo: Dichosos los pobres...de ellos es el Reino de los cielos.

Por último, el servicio nos abre al otro y no nos cierra en sí. Sin embargo la riqueza nos encierra en nosotros. No es humano, cristiano, acumular riquezas mientras otros no tienen que comer...

Pidamos al Señor que no seamos necios...

jueves, 19 de octubre de 2023

COMENTARIO AL EVANGELIO DEL 20 DE OCTUBRE DE 2023

 Lc 12,1-7: Hasta los cabellos de vuestra cabeza están contados.


En aquel tiempo, miles y miles de personas se agolpaban.

Jesús empezó a hablar, dirigiéndose primero a sus discípulos:

«Cuidado con la levadura de los fariseos, que es la hipocresía, pues nada hay cubierto que no llegue a descubrirse, ni nada escondido que no llegue a saberse.

Por eso, lo que digáis en la oscuridad será oído a plena luz, y lo que digáis al oído en las recámaras se pregonará desde la azotea.

A vosotros os digo, amigos míos: no tengáis miedo a los que matan el cuerpo, y después de esto no pueden hacer más.

Os voy a enseñar a quién tenéis que temer: temed al que, después de la muerte, tiene poder para arrojar a la “gehenna”. A ese tenéis que temer, os lo digo yo.

¿No se venden cinco pájaros por dos céntimos? Pues ni de uno solo de ellos se olvida Dios.

Más aún, hasta los cabellos de vuestra cabeza están contados.

No tengáis miedo: valéis más que muchos pájaros».


Es una alegría y una esperanza de saber que los pelos de nuestra cabeza están contados. De saber que no pasa nada que Dios no lo permita. Aunque respeta nuestra libertad, todo pasa según un plan superior que tiene como objetivo la salvación nuestra.


La humanidad se dirige hacia donde Dios la dirige. Esto no implica estar de brazos cruzados, sino al contrario, sentirnos colaboradores de su misión.

Ahí es donde Jesús nos advierte no ser como la levadura de los fariseos. Para ellos, la salvación no era gratuita sino que se basaba en los méritos. Por tanto, no es universal y no incluye a los malos. Es una levadura rancia, que no es capaz de fermentar la masa. En cambio, Jesús quiere otro tipo de levadura, la buena, la que fermenta la masa, mala y buena.

¡Sintámonos sus colaboradores!

miércoles, 18 de octubre de 2023

COMENTARIO AL EVANGELIO DEL 19 DE OCTUBRE DE 2023

   Lc 11,47-54: Se pedirá cuenta de la sangre de los profetas, desde la sangre de Abel hasta la de Zacarías.

En aquel tiempo, dijo el Señor:

-¡Ay de vosotros, que edificáis mausoleos a los profetas, después que vuestros padres los mataron!

Así sois testigos de lo que hicieron vuestros padres, y lo aprobáis; porque ellos los mataron y vosotros les edificáis sepulcros.

Por algo dijo la sabiduría de Dios: «Les enviaré profetas y apóstoles: a algunos los perseguirán y matarán»; y así a esta generación se le pedirá cuenta de la sangre de los profetas derramada desde la creación del mundo; desde la sangre de Abel hasta la de Zacarías, que pereció entre el altar y el santuario.

Sí, os lo repito: se le pedirá cuenta a esta generación.

¡Ay de vosotros, juristas, que os habéis quedado con la llave del saber: vosotros que no habéis entrado y habéis cerrado el paso a los que intentaban entrar!

Al salir de allí, los letrados y fariseos empezaron a acosarlo y a tirarle de la lengua con muchas preguntas capciosas, para cogerlo con sus propias palabras.



Cuando utilizamos la palabra fariseo, pensamos en alguien hipócrita, de doble cara, de fachada, etc. Jesús les llama a los fariseos en muchas ocasiones de hipócritas. 


En la primera sentencia, denuncia precisamente esto. A los que hoy consideran profetas, alguien importante en el pueblo, a ésos anteriormente han asesinado. 


Porque una de las claves de los fariseos es que se creían que lo sabían todo, como Jesús denuncia más abajo. Se encerraban en sus esquemas cerrados, y no dejaban que nadie les advirtiera, corrigiera.


Por ello, los profetas eran molestos y había que eliminarlos. Porque se salían de nuestros esquemas inviolables.


Jesús se caracteriza por ser libre, y por estar abierto a las personas y ello es totalmente compatible con la fe judía, con la Ley, porque fue hecha para el hombre. 


Podemos caer nosotros en un nuevo fariseísmo si nos aferramos a la Ley como si fuera inmutable, como si no pudiera adaptarse a las situaciones de las personas. 


Podemos caer nosotros en un nuevo fariseísmo cuando eliminamos o discriminamos a aquel que habla lo que no queremos oír.


Podemos caer nosotros en un nuevo fariseísmo cuando sólo aceptamos a los que dicen lo que queremos oír. 

martes, 17 de octubre de 2023

COMENTARIO AL EVANGELIO DEL 18 DE OCTUBRE DE 2023

   Lc 10,1-9: La mies es abundante y los obreros pocos.

En aquel tiempo, designó el Señor otros setenta y dos, y los mandó delante de él, de dos en dos, a todos los pueblos y lugares adonde pensaba ir él. Y les decía: 

«La mies es abundante y los obreros pocos; rogad, pues, al dueño de la mies que envíe obreros a su mies. 

¡Poneos en camino! Mirad que os envío como corderos en medio de lobos. No llevéis bolsa, ni alforja, ni sandalias; y no saludéis a nadie por el camino. 

Cuando entréis en una casa, decid primero: "Paz a esta casa”. Y si allí hay gente de paz, descansará sobre ellos vuestra paz; si no, volverá a vosotros. 

Quedaos en la misma casa, comiendo y bebiendo de lo que tengan: porque el obrero merece su salario. No andéis cambiando de casa en casa. 

Si entráis en una ciudad y os reciben, comed lo que os pongan, curad a los enfermos que haya en ella, y decidles: "El reino de Dios ha llegado a vosotros”».


La mies es abundante y los obreros pocos. Mirando el mundo, está patas arriba, como se suele decir.

¡Hay tanto por hacer!

¡Hay tanto bien por hacer!

¡Hay tanto amor por dar!

¡Hay tanto acompañamiento por dar!

¡Hay tanto por consolar!


Está claro que hay mucho trabajo, que todavía estamos lejos de tener el Reino de Dios  totalmente formado o expandido. Para ello, Dios cuenta con nosotros. 


Por ello, sintámonos llamados a transformar el mundo teniendo en cuenta que: muchas personas pequeñas en muchos lugares pequeños haciendo cosas pequeñas pueden cambiar el mundo. 


Hoy celebramos a San Lucas, evangelista. Él nos comunicó lo que había visto y oído. Nos transmitió su experiencia con Jesús. Su evangelio irradia ternura y muestra de una manera mejor que los otros, la misericordia de Dios manifestada en Jesús.


Su contribución al Reino de Dios fue ésta. Tantas generaciones nos hemos beneficiado de su palabra. Por ello, cualquier gesto, palabra, acción que hagamos con amor y por amar, ya estamos construyendo el Reino.


Roguemos a Dios para que todos tomemos conciencia de nuestra responsabilidad.

lunes, 16 de octubre de 2023

COMENTARIO AL EVANGELIO DEL 17 DE OCTUBRE DE 2023

 Lc 11,37-41: Dad limosna, y lo tendréis limpio todo.

En aquel tiempo, cuando Jesús terminó de hablar, un fariseo lo invitó a comer a su casa.

El entró y se puso a la mesa.

Como el fariseo se sorprendió al ver que no se lavaba las manos antes de comer, el Señor le dijo:

–Vosotros, los fariseos, limpiáis por fuera la copa y el plato, mientras por dentro rebosáis de robos y maldades.

¡Necios! El que hizo lo de fuera, ¿no hizo también lo de dentro?

Dad limosna de lo de dentro, y lo tendréis limpio todo.


Como decía un autor, Jesús es un invitado peligroso. Viene a tu casa, y luego te dice que cambies los muebles de sitio, que tires esto, que compres lo otro.


Así es Jesús, cuando lo invitas a tu casa (corazón),  te lo cambia todo. Cuando Jesús te toca, te trastoca...Y nos conviene, porque nadie mejor que Él nos organiza y ordena nuestra vida.


Pero no tengamos miedo. Hoy celebramos a San Ignacio de Antioquía, si él pudo y confió, ¿por qué yo no?.

domingo, 15 de octubre de 2023

COMENTARIO AL EVANGELIO DEL 16 DE OCTUBRE DE 2023


Lc 11,29-32: A esta generación no se le dará más signo que el signo de Jonás.


En aquel tiempo, la gente se apiñaba alrededor de Jesús, y él se puso a decirles:

«Esta generación es una generación perversa. Pide un signo, pero no se le dará más signo que el signo de Jonás. Pues como Jonás fue un signo para los habitantes de Nínive, lo mismo será el Hijo del hombre para esta generación.

La reina del Sur se levantará en el juicio contra los hombres de esta generación y hará que los condenen, porque ella vino desde los confines de la tierra para escuchar la sabiduría de Salomón, y aquí hay uno que es más que Salomón.

Los hombres de Nínive se alzarán en el juicio contra esta generación y harán que la condenen; porque ellos se convirtieron con la proclamación de Jonás, y aquí hay uno que es más que Jonás».


No se le dará más signo que el de Jonás. La gente se agolpaba para ver el milagro, lo extraordinario. Y no se daban cuenta que el milagro es el mismo Jesús, que lo extraordinario es su persona. 


Podemos preguntarnos si somos como la multitud que se agolpaba entorno a Jesús, no para escucharle, seguirle a él, sino por la curiosidad.

Preguntémonos si sólo queremos a Jesús por lo que nos pueda dar. 

Preguntémonos si esperamos de Jesús que solucione todos los problemas que pasamos.

Preguntémonos si queremos seguir a Jesús hasta la Cruz.

Preguntémonos si sabemos lo que es seguir a Jesús.

Preguntémonos si estamos dispuestos a seguirlo sin ningún signo. 

Preguntémonos si queremos realmente a Jesús o sólo sus obras.

Preguntémonos si estamos dispuestos a confiar totalmente en Él.

Y es que...


La Salvación es Jesús.

La Felicidad es Jesús.

La Vida Plena es Jesús

La Esperanza es Jesús.

El Evangelio es Jesús.

La Cuaresma es Jesús.


Hoy celebramos entre otros, a Santa Margarita María de Alacoque, que saldrá en procesión el próximo domingo. Ella nos invita a acoger la misericordia de Dios a través de la devoción al Sagrado Corazón de Jesús. 

jueves, 12 de octubre de 2023

COMENTARIO AL EVANGELIO DEL 13 DE OCTUBRE DE 2023

   Lc 11,15-26: Si yo echo los demonios con el dedo de Dios, entonces es que el reino de Dios ha llegado a vosotros.

En aquel tiempo, habiendo echado Jesús un demonio, algunos de entre la multitud dijeron:

-Si echa los demonios, es por arte de Belzebú, el príncipe de los demonios.

Otros, para ponerlo a prueba, le pedían un signo en el cielo.

El, leyendo sus pensamientos, les dijo:

-Todo reino en guerra civil va a la ruina y se derrumba casa tras casa.

Si también Satanás está en guerra civil, ¿cómo mantendrá su reino?

Vosotros decís que yo echo los demonios con el poder de Belzebú; y si yo echo los demonios con el poder de Belzebú, vuestros hijos, ¿por arte de quién los echan? Por eso, ellos mismos serán vuestros jueces.

Pero si yo echo los demonios con el dedo de Dios, entonces es que el Reino de Dios ha llegado a vosotros.

Cuando un hombre fuerte y bien armado guarda su palacio, sus bienes están seguros.

Pero si otro más fuerte lo asalta y lo vence, le quita las armas de que se fiaba y reparte el botín.

El que no está conmigo, está contra mí; el que no recoge conmigo, desparrama.

Cuando un espíritu inmundo sale de un hombre, da vueltas por el desierto, buscando un sitio para descansar; pero como no lo encuentra, dice:

-Volveré a la casa de donde salí.

Al volver se la encuentra barrida y arreglada.

Entonces va a coger otros siete espíritus peores que él, y se mete a vivir allí.

Y el final de aquel hombre resulta peor que el principio.


Muchas palabras y acciones de Jesús fueron malinterpretadas por sus los fariseos. ¡Cuando todo lo que hizo era bueno!. En medio de esa acusación, Él termina zanjando: “si yo echo los demonios con el dedo de Dios, entonces es que el Reino de Dios ha llegado a vosotros”.


El pueblo judio había sido un pueblo que sufrió mucho por parte de muchas naciones. Estuvo sometido en varias ocasiones. En la época de Jesús, sometido al Imperio Romano. Surge entonces la esperanza del Mesías que iba a restaurarlo todo. El Mesías instauraría el Reino de Dios.


Por ello, es importante la sentencia de Jesús. Afirma que si actúa de parte de Dios es que el Reino ha comenzado. La esperanza no queda defraudada porque Dios cumple sus promesas. A pesar del sometimiento del pueblo judío, la fuerza de Dios ya está actuando. Ya queda menos para que el Reino se despliegue en toda su plenitud.