COMENTARIO AL EVANGELIO DEL 14 DE ABRIL

Jn 6,44-51: Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo.

En aquel tiempo, dijo Jesús a la gente:

- «Nadie puede venir a mí, si no lo atrae el Padre que me ha enviado.

Y yo lo resucitaré el último día.

Está escrito en los profetas: "Serán todos discípulos de Dios."

Todo el que escucha lo que dice el Padre y aprende viene a mí.

No es que nadie haya visto al Padre, a no ser el que procede de Dios: ése ha visto al Padre.

Os lo aseguro: el que cree tiene vida eterna.

Yo soy el pan de la vida. Vuestros padres comieron en el desierto el maná y murieron: éste es el pan que baja del cielo, para que el hombre coma de él y no muera.

Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo; el que coma de este pan vivirá para siempre.

Y el pan que yo daré es mi carne para la vida del mundo.»

Reflexión

Sigue la discusión con Jesús y en el día de hoy nos pone las condiciones para creer en Él:

1) Que el Padre lo atraiga. Algunas veces consideramos nuestra fe como un patrimonio nuestro, y sin embargo, es un enganche (una especie de troyano que se mete dentro de ti y que te hace estar en comunión con el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo). Por tanto, es un don de Dios.

2) La docilidad a Dios. Creer significa confiar, ser dócil, dejarse llevar, ponerlo todo en sus manos, darle autoridad.

3) Escuchar al Padre. La oración siempre está en toda relación de fe con Dios.